Virginia Ortega

Llegué a mi primera clase de Yoga hace ya más de 10 años. Pensando que me dirigía a esta práctica con la única finalidad de trabajar mi cuerpo me encontré con otras necesidades psicológicas y físicas mucho más importantes, que ni me había parado a observar.
En el yoga descubrí herramientas increíbles, de un gran beneficio terapéutico, demás de una gran sencillez para poder hacer así uso de ellas en mi día a día y de forma autosuficiente.
Dos años más tarde ya estaba formándome como profesora con la única intención de profundizar en mi práctica, y así continuar aportando tranquilidad, estructura y estabilidad a mi vida y a la de mi familia. Para mi sorpresa, nada más terminar la formación ya me pidieron dar mis primeras clases y compartir lo que estaba aprendiendo en una escuela. Desde entonces no he parado de investigar y profundizar en este apasionante camino como alumna y como profesora.
He ido recogiendo en el camino lo que diferentes técnicas (pranayama, mantras, meditación…) y diferentes prácticas (Hatha, Vinyasa, Ashtanga, Yoga Nidra, Pilates…) han ido aportándome. En este momento utilizo una práctica de Vinyasa flow o Hatha, dependiendo del ritmo que necesito en mi práctica o el ritmo que necesita el grupo.
Comencé hace dos años mis estudios en biodescodificación, conocimientos que me gusta introducir en mi práctica y en mis clases.
En el Yoga he descubierto un camino para toda la vida, un camino que me está permitiendo estar presente en mi día a día, soltando todo aquello que ya no necesito y trayendo a mi vida todo lo que me nutre y sana.
Imparte: Vinyasa Yoga